-Te juro que, en aquel momento en que te ví, me parecistes lo más bonito que había presenciado en mi vida. Oí tu risa y sonreí con ella, sin dejar de prestar atención a cada uno de tus movimientos. Pero nunca pensé que pudiera hacerte tanto daño.
+Te miré, me parecías increíble. Entonces nuestros ojos se encontraron, me dí cuenta de que me mirabas. Y en aquel momento supe que me harías mucho, mucho daño.
A.
+Te miré, me parecías increíble. Entonces nuestros ojos se encontraron, me dí cuenta de que me mirabas. Y en aquel momento supe que me harías mucho, mucho daño.
A.
No hay comentarios:
Publicar un comentario